"Debido a un accidente de trabajo, no pude conservar el seguro médico de mi empresa. Tenía graves problemas de hipertensión, que requerían varias visitas al consultorio y considerables pruebas de laboratorio, así como otros problemas médicos continuos. Busqué un seguro médico patrocinado por el Estado, pero me pareció inasequible. Pagaba de mi bolsillo todos los gastos médicos y los medicamentos recetados. A veces, el coste hacía que tuviera que saltarme tratamientos que no podía pagar.
Un amigo vio una referencia al Proyecto Acceso y me dio su número de teléfono. Pensé que no estaría de más llamar, aunque todos los demás recursos eran demasiado caros o yo no cumplía los requisitos.
Me examinaron por teléfono, el personal fue muy compasivo, comprensivo, conocedor y servicial. Me guiaron a través de las opciones a las que podía optar. Pude elegir un seguro médico que se ajustaba a mis necesidades.
Estuve en el programa durante 18 meses hasta que pude optar a otro tipo de asistencia sanitaria. Puedo decir sinceramente que el Proyecto Access probablemente me salvó la vida.
A los que donan dinero, y a los médicos que donan atención, puedo decirles que este programa se administra cuidadosamente y llega realmente a los necesitados. Siempre estaré agradecida por la ayuda que recibí del Proyecto Access".